Maderas del viejo muelle de Nueva Palmira siguen sin destino
Las estructuras retiradas durante la reconstrucción del muelle palmirense están almacenadas en el Varadero de Carmelo, cubiertas por la maleza. Proyectos aprobados para reutilizarlas no llegaron a concretarse, aunque podrían reactivarse por la comunidad.
Varias toneladas de maderas del antiguo muelle de Nueva Palmira permanecen sin destino definido, pese a que existían proyectos aprobados para darles un nuevo uso. Los materiales se encuentran almacenados en el Varadero de Carmelo, expuestos a la intemperie, y algunos parcialmente cubiertos por la vegetación.
El viejo muelle fue inhabilitado en 2020, poco después de que asumiera el entonces director nacional de Hidrografía, Marcos Paolini. Las obras de reconstrucción comenzaron en 2023 y culminaron con la inauguración del nuevo muelle el 15 de noviembre del pasado año.
Con las maderas retiradas se había proyectado construir un muelle decorativo, un mirador en el balneario Brisas del Uruguay, una rampa de acceso en playa Corbacho, y destinar una parte al Club de Leones para el proyecto centro vial para niños. “Los expedientes estaban aprobados, pero no llegamos a ejecutar las obras”, explicó Paolini a EL ECO.
Estos proyectos podrían retomarse si la comunidad los vuelve a plantear ante las actuales autoridades. Según Paolini, sería una oportunidad para embellecer la ciudad, mejorar la accesibilidad y preservar el patrimonio.
Cabe recordar que parte de las maderas retiradas fueron utilizadas para construir un mirador en la Batería de Ribera, en Punta Gorda, y también se cedieron piezas a Villa Soriano con motivo de la celebración de sus 400 años en 2024.
Mientras tanto, las maderas del viejo muelle de Nueva Palmira permanecen sin uso, esperando una nueva iniciativa que las reintegre al paisaje y al disfrute ciudadano. Debería votar la comunidad qué obras ejecutar.
