Cumbre del Mercosur arrancó con anuncio de un nuevo TLC con los países del EFTA
El presidente uruguayo Yamandú Orsi fue el primero en arribar a la capital argentina; encuentro confirmado entre Cristinta Kirchner y Lula.El presidente argentino Javier Milei es el anfitrión de esta nueva Cumbre del Mercosur que comenzó este miércoles en el emblemático Palacio San Martín de Buenos Aires con reuniones entre ministros de Economía y presidentes de los bancos centrales respectivos, y que culminará este jueves con la sesión plenaria de los Presidentes de los Estados parte y Estados asociados.
Además, este jueves, se producirá el traspaso de la Presidencia Pro-Témpore del bloque de Argentina a Brasil, hecho que genera gran expectativa por el encuentro, cara a cara, entre los presidentes de Argentina Javier Milei y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. La novedad de este miércoles surgió del encuentro de cancilleres y es el anuncio de la conclusión de las negociaciones de un Tratado de Libre Comercio entre los Estados partes del signatarios del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y los Estados de la EFTA (Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza) que no forma parte de la Unión Europea. No obstante, el foco también estará puesto en estas próximas horas en los avances que puedan anunciarse en cuanto al tratado con la Unión Europea, ya firmado, teniendo en cuenta la resistencia que está generando para su homologación definitiva en algunos estados europeos, como Francia. Sobre este tema, el canciller de Brasil, Mauro Vieira, insitió en la conferencia de prensa que espera que el acuerdo sea ratificado dentro de este próximo semestre.
MERCOSUR-EFTA
Reunidos en el Salón Libertador, el canciller de Argentina, Gerardo Werthein, hizo público el acuerdo Mercosur – EFTA en conferencia de prensa conjunta con los cancilleres respectivos y los ministros de Economía de los países de ambos bloques. El Tratado Mercosur-EFTA creará un área de libre comercio de casi 300 millones de personas con un PIB combinado de más de U$S 4,3 trillons. Ambos lados se beneficiarán de mejoras de acceso a los mercados para más del 97% de sus exportaciones, lo que se traducirá en un incremento del comercio bilateral y ventajas para empresas e individuos. El acuerdo cubrirá el comercio de bienes, comercio de servicios, inversiones, derechos de propiedad intelectual, compras públicas, competencia, reglas de origen, defensa comercial, medidas sanitarias y fitosanitarias, obstáculos técnicos al comercio, asuntos legales y horizontales, incluyendo solución de controversias y un capítulo de comercio y desarrollo sostenible con su correspondiente entendimiento. Las negociaciones del Tratado comenzaron en 2015 con una serie de conversaciones exploratorias. Posteriormente, se concretó una primera ronda en junio de 2017 en Buenos Aires. En total, se realizaron 14 rondas de negociación. En el momento de responder preguntas, la Secretaria de estado de asuntos económicos de Suiza, Helene Budliger Artieda, afirmó que este acuerdo es “prioritario” para los países del EFTA y agregó que los cuatro países ya tienen importantes inversiones en el Mercosur.
Arribos y reuniones
El presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, fue el primero en arribar a la Argentina. Se encuentra desde el martes en la capital argentina adonde llegó, por la noche, en un vuelo comercial desde Sevilla. El mandatario uruguayo participó de la Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo Sostenible. Este miércoles, será distinguido con la entrega del Doctorado Honoris Causa por parte de la Universidad de Congreso, en un acto que se realizará en la embajada de Uruguay. La delegación de Uruguay está integrada, además, por el canciller Mario Lubetkin y por el ministro de Economía, Gabriel Oddone. En el correr de este miércoles y hasta la medianoche está previsto el arribo del resto de los mandatarios, incluido José Raúl Mulino, de Panamá, que hará su debut como Estado asociado del Mercosur. Por orden de arribo, lo harán el presidente de Paraguay, Santiago Peña (14.30 horas), la vicepresidente de Ecuador, María José Pinto (17.30 horas), el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (18.30 horas) y el de Bolivia Luis Arce (22 horas). La Cumbre estuvo precedida, lunes y martes, por varias reuniones preparatorias de los principales organismos del Mercosur: la Comisión de Comercio, el Foro de Consulta y Concertación Política, el Grupo Mercado Común y el Consejo del Mercado Común.
Tribunal autorizó visita de Lula a Cristina
Todo indica que este jueves, después de la Cumbre, se produciría el encuentro entre el presidente brasileño y la expresidenta Cristina Kirchner quien cumple arresto domiciliario por la condena de seis años de prisión impuesta en la causa Vialidad. La defensa de Cristina Kirchner pidió autorización al Tribunal Federal Oral N° 2, para recibir al mandatario norteño, tal como establece el reglamento carcelario y éste se la concedió. “El encuentro será este jueves por la tarde, después de la cumbre”, confirmaron al Diario La R fuentes políticas locales. Cristina Kirchner tiene como una de las reglas de conducta que le fijaron para cumplir su condena la necesidad de pedir permiso para recibir visitas extraordinarias y justificar los motivos. En cambio tiene autorizado el ingreso a su casa de un grupo fijo de personas, entre policías de custodia, médicos, familiares y abogados. La expresidenta apeló ante la Cámara de Casación estas limitaciones y el uso de una tobillera electrónica para ser controlada y evitar que salga de su casa. Estas peticiones se resolverían el lunes próximo en una audiencia de Casación.
Periodistas “aislados”
Para la prensa, se ha instalado en un edificio anexo al Palacio San Martín, un moderno centro de información con muy buen equipamiento informático y conectividad. Por obvias razones, se ha montado un importante dispositivo de seguridad que incluye estrictos controles al entrar y al salir tanto del centro de prensa como para desplazarse hacia cualquier otra dependencia relacionada a la Cumbre. De todos modos, se escuchan quejas de algunos periodistas, más que nada locales, por el “aislamiento” en el que tienen que desarrollar su trabajo sin acceso a las reuniones ni tener contacto directo o personal con las distintas delegaciones, más allá de las transmisiones pautadas a través de las redes sociales.