Ministerio de Ambiente: cuenca del Río Negro con buena salud, pero tiene floraciones por residuos fitosanitarios
Tres ministerios desarrollan una iniciativa para aumentar el conocimiento sobre la cuenca, mejorar la calidad de su agua potable y el saneamiento, y asistir a los productores en prácticas sostenibles.“El agua de la cuencadel Río Negro goza de buen estado, pero con floraciones”, dijo Gerardo Amarilla, subsecretario del Ministerio de Ambiente (MA), en un evento sobre este plan presentado en Torre Ejecutiva ayer.
“Iniciativa para el río Negro” es la primera etapa de un plan para mejorar la calidad de agua de la cuenca del Río Negro, en el que trabajan los ministerios de Industria Energía y Minería (MIEM), el de Ganadería, Agricultura y Pesa (MGAP) y el de Ambiente (MA).
La iniciativa tiene como objetivo aumentar el conocimiento sobre la cuenca, mejorar la calidad de su agua potable y el saneamiento, asistir a los productores de la zona en prácticas sostenibles, proteger la biodiversidad y fortalecer otras capacidades locales para el desarrollo del plan.
El plan abarca más de 30 proyectos de los mencionados ministerios, además la cartera de Vivienda en algunos de ellos, las intendencias, actores privados y académicos.
Amarilla destacó que la calidad de agua en la cuenca es “buena”, pero con floraciones ya que hay residuos fitosanitarios que provienen de las actividades de producción en ciertas temporadas, además de los desechos sólidos y líquidos de las ciudades, entre otras afectaciones.
“Algunos problemas de la calidad del agua tienen que ver con la producción, como ser el uso de agroquímicos, y otros están vinculados al manejo de la gestión de residuos”, afirmó.
Consultado por las cianobacterias y los productos agroquímicos que se vierten, Amarilla afirmó que debido a esas situaciones, se está procurando mejorar la gestión del uso de productos agrícolas en general, para que se generen “espacios de amortiguación” y que esos productos se puedan degradar antes de llegar al agua.
Agregó que todavía existen impactos negativos de actividades productivas intensivas, como los confinamientos a corral, y que la actividad agrícola intensa del lado de Brasil también genera problemas.
“Nos preocupa y estamos trabajando con los productores y los otros ministerios para mejorar cada vez más lo que es la gestión en el territorio y su afectación en la calidad del agua”, dijo.
Sobre la actividad de UPM, reconoció que “hubo implementos puntuales, ninguno de los cuales afectó la calidad del agua del río Negro, pero evidentemente ocurrieron algunas observaciones”.
Negó que el agua del río Negro esté comprometida por la producción de arroz, a diferencia de en otras cuencas que sí requieren mejorar sus prácticas ambientales a ese nivel, un protocolo que está destinado asimismo a mejorar la certificación del arroz.
Juan Ignacio Buffa, subsecretario del MGAP, comentó que los estudios que se están realizando ayudarán a mejorar las políticas públicas y el marco jurídico en la materia.
Por su parte, Laura Lacuague, coordinadora de la Unidad Ambiental del MIEM, destacó la importancia de incorporar la dimensión económica de las actividades que se realizan en lo ambiental y social en el país.