La construcción se apronta para retomar su crecimiento tras cinco años de caída

La inversión de UPM 2, la terminal portuaria, el ferrocarril y la concreción de PPP marcan el camino para la recuperación de un relevante sector económico del país para 2020

Entre 2012 y 2013 la construcción ocupó a más de 70 mil trabajadores, lo que implicó un récord histórico que además, empujó de forma importante al alza los salarios en un sector que siempre generó mucho empleo.

Según cálculos realizados  por la Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU) en base a datos del Banco Central del Uruguay (BCU), en 2012 la inversión en la industria fue de US$ 7.035 millones, en 2013 de US$ 8.248 millones y en 2014 de US$ 7.825 millones.

Pero a partir de 2015, la industria que alcanzó niveles inéditos de inversión y empleo, bajó sustantivamente y desde hace cinco años se mantiene estancada, con inversiones entre el sector público y privado en el entorno de los US$ 6.500 millones. Durante 2018 la inversión del sector privado fue por US$ 4.579 millones y la del público por US$ 2.022 millones

Esta caída ha implicado que buena parte de los 60 mil puestos de trabajo que se han perdido en el país en los últimos cinco años sean explicados por una caída relevante en la construcción. Se estima que de esa cifra al menos unos 20 mil puestos de trabajo perdidos corresponden al sector.


Sin embargo, la expectativa para 2020 es positiva, después de varios años de estancamiento se espera que la industria vuelva a crecer apuntalado por varios proyectos ya decididos.

El presidente de la CCU, Diego O’Neill, dijo que por un lado se va a tener la construcción de UPM 2, lo que incluye tres cosas: la planta de celulosa, la terminal portuaria y el ferrocarril. En el último caso se trata de un proyecto de Participación Público Privado (PPP).
Desde la gremial empresarial se espera que a partir de estos emprendimientos haya unos 5 mil trabajadores más ocupados que en la actualidad, al menos por los próximos dos años desde mediados de 2020.

A esto se suma que en los últimos meses de este año, comentó O’Neill a El Observador, se han concretado otros proyectos PPP (tres viales y uno educativo) que también van a dinamizar el sector. Además, para el año próximo puede también concretarse otro emprendimiento educativo.

“Se espera un volumen de actividad importante que va a darnos un mejor 2020”, comentó el también director y propietario de la empresa de construcción, Ceaosa.

En particular, el sector de la construcción llegó a tener entre los años 2012 y 2013 más de 70 mil trabajadores en obra, cuando se dio un boom en las inversiones sobre todo desde el sector privado.

En este sentido, O’Neill sostuvo que hoy hay unos 25 mil trabajadores menos que hace cinco años atrás y aunque se espera que para 2020 vaya a crecer el número de ocupados, difícilmente vaya a superar los 50 mil.  Entre 2018 y 2019 se promediaron 44 mil trabajadores contratados para la construcción en Uruguay.
“Estos últimos cinco años en cuanto a la actividad han sido de caída y eso no fue bueno para nadie. Probablemente 70 mil trabajadores en la construcción es un pico histórico, no es lo normal, pero aspiramos a tener más de 50 mil trabajadores a pesar de saber que puede ser algo que no vaya a suceder”, señaló O’Neill.

Con respecto a la posibilidad de capitales provenientes desde Argentina,  O'Neill apuntó que si bien se han visto movimientos en la compra- venta inmobiliaria, para el caso de nuevas infraestructuras aún no se divisan demasiadas oportunidades. 

“Las inversiones llevan su tiempo de maduración y tenemos expectativas haya un repunte con el cambio de administración acá y allá. Pero todavía no hay nada concreto”, señaló.

Por su parte, el encargado de prensa del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca), Marcelo Díaz, expresó que si bien los números que se manejan son importantes –manejó 8 mil que es la cifra que ha dado el gobierno-, todavía no se puede saber la cantidad de trabajadores que van a estar ocupados porque hay que esperar a ver cuál va a ser la realidad concreta.

“Sabemos que hay un montón de proyectos que ya están designados para el año que viene. Esto está generando expectativa tanto en nosotros como en el conjunto de los compañeros, que está claro que hoy estamos en condiciones que no son las más favorables”, apuntó Díaz.

La notaria baja de la actividad hacen difícil pensar que los números que se dieron en 2012 y 2013 vuelvan a darse, consideró Díaz, debido a que para que esa realidad se repita se necesitaría de una conjunción de inversiones extranjeras de gran porte. En el presente el Sunca tiene afiliados a unos 20 mil trabajadores.

Sobre este punto, Díaz dijo que una de las características particulares del sector es la “movilidad” que tiene por la cantidad de altas y bajas que se dan, por obras finalizadas o iniciadas, además de que muchos trabajadores son difícil de detectar por las propias características del trabajo, como por ejemplo las reformas de casas particulares.

Un industria que pesa
La inversión en construcción por parte del sector privado ha superado ampliamente a la inversión de parte del sector público, según datos del informe Inversión en la Industria de la Construcción en Uruguay realizado por la CCU.

“En promedio, en la última década, mientras que el 71% de la inversión total anual en construcción correspondió a inversión realizada por el sector privado, el 29% correspondió a inversión pública. En números, en 2018, último año cerrado para el que se disponen datos, la inversión privada en construcción ascendió a US$ 4.580 millones,  nivel mínimo desde 2011 (en dólares corrientes) y la inversión pública en construcción alcanzó a US$ 2.020 millones, el menor registro desde el año 2012”, se apuntó.

A su vez, se destacó que el año pasado el total invertido en el sector de la construcción representó el 11,1% del PIB nacional, mientras que si se toman en cuenta los últimos diez años equivalió al 12,2%. En 2018, la inversión privada en vivienda representó el 15% del total invertido en el sector de la construcción, mientras que en 2008 significó el 25%.

En tanto, la inversión del sector privado no vinculada a vivienda abarcó el 54% del total invertido en el último año cerrado, mientras que una década atrás implicó el 40%.Por su parte, la inversión realizada desde el sector público alcanzó a representar el 31% de la inversión total en construcción en 2018, después de haber representado el 34% en 2008.

Diario EL OBSERVADOR - Montevideo - URUGUAY - 09 diciembre 2019