Preparan llamado para incorporar 30 ómnibus eléctricos en Montevideo
El Poder Ejecutivo subsidiará por completo la diferencia de costo con las unidades que marchan con combustible; el costo de un ómnibus convencional ronda los US$ 100.000 y el eléctrico alcanza los US$ 450.000
El Poder Ejecutivo prepara un llamado para incorporar 30 ómnibus eléctricos al sistema de transporte metropolitano de Montevideo para el primer semestre de este año, luego de que en 2016 desembarcara el primero de este tipo a modo de prueba, afirmaron a El Observador fuentes de la comuna. El objetivo a nivel nacional es alcanzar las 100 unidades de este tipo en un plazo de dos años.
En la pasada Rendición de Cuentas el gobierno incluyó un artículo, el 325, que estableció la implementación de un subsidio destinado a apoyar la “transición inicial hacia tecnologías más eficientes y sostenibles en el transporte público colectivo de pasajeros a nivel nacional”. La idea es sustituir hasta el 4% de la flota de ómnibus de motor diésel por unidades eléctricas.
Está previsto que antes de fin de mes termine de redactarse la reglamentación de ese artículo, informaron a El Observador fuentes del Ministerio de Economía y Finanzas. Además, esa reglamentación incluirá un anexo técnico en el que se detallará los requisitos que deberán cumplir los fabricantes, los ómnibus y las empresas.
Por el momento, el único ómnibus eléctrico que circula en la capital es uno que adquirió la empresa Cutcsa, fabricado en China por BYD. Este vehículo cuenta con una autonomía de 250 kilómetros y se carga de forma completa en tres horas y media o cuatro. Su llegada fue anunciada con bombos y platillos por parte del Ejecutivo, aunque dos años después sigue siendo el único que circula en la ciudad.
Desde que llegó, el ómnibus ha sido puesto a prueba por parte de Cutcsa en cada una de las líneas que opera en la capital. Como es la empresa con mayor participación en Montevideo, se prevé que de las 30 unidades que desembarcarán en Montevideo, 20 sean adquiridas por Cutcsa.
El gerente general de Cutcsa, Fernando Barcia, explicó a El Observador que el subsidio que brindará el Poder Ejecutivo para alcanzar las 100 unidades a nivel nacional es clave para que las empresas puedan incorporar este tipo de vehículos. Según señaló, un ómnibus a combustible ronda los US$ 100 mil, mientras que uno eléctrico oscila entre US$ 400 mil y US$ 450 mil. A esto hay que sumarle que las empresas deberán adquirir los puestos de carga e invertir en la obra civil para instalarlos en sus plantas.
Pero la idea de que en los próximos años todos los ómnibus sean eléctricos no parece estar cerca de cumplirse, ya que Barcia advirtió que, con la tecnología que hoy está disponible, entre 20% y 25% de los recorridos por la capital podrían incorporar estas unidades.
A mejorar
Además, hay una serie de inconvenientes que se experimentaron con el vehículo que se está usando que deberán ser subsanados para ampliar la flota de vehículos eléctricos. Por ejemplo, Cutcsa cuenta con un stock de combustible en la planta Añón –donde estaciona la mitad de la flota de la compañía, unos 500 vehículos– para cubrir el abastecimiento de cuatro días y medio. Además, Cutcsa cuenta con dos camiones cisternas para que, en caso de conflicto en la planta de Ancap de La Teja, permiten ir a buscar combustible a otros puntos del país.
Por eso, para la empresa es importante mantener la autonomía y que UTE le asegure una potencia de carga suficiente para cargar varios vehículos a la vez. “Eso con la electricidad lo perdemos. Dependemos mucho más de que UTE nos asegure la potencia que necesitamos”, declaró el jerarca de la empresa de transporte, de la que el asesor presidencial Juan Salgado es presidente.
“La gestión de la carga pasa a ser importante”, aseguró Barcia. Para la empresa también es clave que los vehículos que se vayan a adquirir sean de carga lenta y nocturna, ya que es en esas horas en las que la tarifa de carga es más barata. UTE divide las tarifas en tres categorías: horas punta (de 18 a 22), horas llano (de 7 a 18 y de 22 a 24) y horas valle (de 24 a 7). En las horas punta se cobra más de $ 13,6 por kilovatio hora, en las llano desciende a $ 5,2 y en las valle baja a $ 2,8.
También es necesario para la empresa que en el llamado para adquirir más ómnibus eléctricos se incorpore a unidades que tengan ventanillas que permitan que el aire circule, sin la necesidad de prender el aire acondicionado. Es que en el ómnibus que está a prueba el aire acondicionado tiene que estar siempre prendido porque las ventanillas no se pueden abrir ni cuenta con escotillas en el techo. Según Barcia, el consumo del aire acondicionado es de hasta 25% de la carga, por lo que se pierden 50 kilómetros de autonomía.
El principal beneficio de los ómnibus eléctricos tiene que ver con lo ambiental. Para Barcia la calidad de los viajes es mejor, ya que los vehículos son “más silenciosos”. “El tipo de motor genera muchas menos vibraciones y las carrocerías son más durables”, afirmó.
“Tiene muchos beneficios en lo que tiene que ver con la calidad del viaje”, agregó Barcia.