Panamá, un sumidero de carbono de 27 millones de toneladas
La Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático evaluó la capacidad de absorción de los bosques del país. La organización aprobó al Istmo cinco actividades de reducción de emisiones y recibir pagos por servicios ambientales
Los bosques de Panamá tienen la capacidad para absorber 27.7 millones de toneladas de dióxido de carbono, principal gas que causa el efecto invernadero, autor del cambio climático.
Panamá está apostando a cinco actividades forestales para reducir sus emisiones de carbono y recibir compensaciones por servicios ambientales.
La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), por medio del ‘Reporte de Evaluación Técnica del Nivel de Referencia Forestal de Panamá', aprobó que el país podría mercadear 27,735,675 toneladas de CO2 por año, considerando la capacidad de absorción de sus bosques.
Con este resultado, Panamá se suma a la lista de países evaluados por la CMNUCC y se convierte en el primero del mundo al que las Naciones Unidas le aprueba cinco actividades forestales para recibir pagos por desempeño ambiental, ya sea por parte del Fondo Verde del Clima, por esquemas de compensación o reducción de emisiones de carbono o por mecanismos nacionales o regionales existentes para este propósito. A la fecha, solo 29 países han sometido a evaluación de Naciones Unidas sus respectivos niveles de referencia forestal.
La evaluación internacional se extendió por un año y cuatro meses. El equipo de expertos evaluadores estuvo compuesto por María José Sanz Sánchez, de la Secretaría de la CMNUCC, quien lo coordinó; Andrés Espejo, de España: Brian Zutta Salazar, de Perú; y Thiago de Araújo Mendes, de Brasil.
Por el Ministerio de Ambiente, participaron Elba Cortés, directora de Cambio Climático; Dalia Vargas, directora Forestal; Iris Barrios, directora de Verificación del Desempeño Ambiental; y los especialistas Carlos Gómez, Marcial Arias, René López, Javier Martínez, Ángela Jiménez y Pedro Vivar.
El informe de evaluación resaltó que los datos e información provistos por el país son transparentes, completos y de acuerdo con las directrices del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
Las cinco actividades evaluadas son: reducción de las emisiones derivadas de la deforestación, reducción de las emisiones derivadas de la degradación del bosque, aumento de las reservas de carbono, conservación de las reservas de carbono y manejo sostenible de los bosques.
Los datos e información presentados por Panamá fueron corroborados con el uso de imágenes satelitales Landsat 7 y 8 (Estados Unidos), ALOS PALSAR (Japón), Sentinel 2 (Europa) y RapidEye, utilizando Collect Earth, Sistemas de Información Geográfica y Google Earth, con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Coalición de Naciones con Bosques Tropicales (CFRN, por sus siglas en inglés). La evaluación de Naciones Unidas se actualizará cada cinco años.
El ministro de Ambiente, Emilio Sempris, expresó que ‘el positivo resultado beneficiará a las comunidades rurales, pueblos originarios, conservadores de bosques y productores agroforestales, y viene a consolidar en el plano nacional e internacional el legado que deja esta administración por la adopción de la Estrategia Forestal 2050 en 2019, el Sistema de Trazabilidad Electrónica Forestal en 2018, la Ley 69 de 2017 de Incentivos a la Reforestación, el Programa de Veeduría Forestal en 2016 y la Alianza por el Millón de Hectáreas Reforestadas en 20 años, junto con el Acuerdo de París en 2015'.
Sempris concluyó agradeciendo al equipo técnico panameño que elaboró y sustentó el informe de carbono forestal ante los evaluadores internacionales de Naciones Unidas. También agradeció a FAO, PNUD y a la CFRN por el apoyo técnico durante el proceso de evaluación internacional que se extendió por un año y cuatro meses.
ÁREAS BOSCOSAS
COBERTURA. A pesar de que Panamá ha perdido —desde la década de 1940 — más del 60% de cobertura boscosa por actividades humanas, según una publicación previa de La Estrella de Panamá , el país cuenta actualmente con más del 35% de los bosques del territorio nacional protegidos, compuestos en su mayoría por parques nacionales y otras áreas protegidas que se conectan y forman el Corredor Biológico Mesoamericano del atlántico panameño.
Este corredor, protegido contra amenazas como la tala indiscriminada (deforestación), minería, agricultura, ganadería, construcciones urbanísticas e infraestructura, permite el libre tránsito de muchas especies de animales y aves.
Los bosques son los principales aliados para frenar los efectos del cambio climático. Por eso, mediante la Estrategia Nacional de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación del Bosque (REDD) se propone una serie de acciones para reducir la degradación y deforestación de bosques. Además, el proyecto Alianza por el Millón de Hectáreas es una iniciativa público-privada que busca incrementar más nuestra captura de carbono y son uno de los tantos esfuerzos que el país está desarrollando en materia de cambio climático.
En 2014, Panamá había perdido unas 540 mil hectáreas de bosques y dos millones de hectáreas de tierra degradadas.