MÀXIMA TENSIÓN
No se detectan fugas radioactivas tras ataque de Rusia a la mayor central nuclear de Europa“
Un bombardeo ruso impactó anoche en la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa en el centro de Ucrania, amenazando provocar un desastre diez veces mayor al de Chernóbil en 1986. Las fuerzas rusas ocuparon el territorio nuclear ucraniano de Zaporiyia, indicó la agencia de inspección de las plantas atómicas de Ucrania, que aseguró que no se detectó ninguna fuga radiactiva.
En un principio, se temía que las consecuencias pudieran desatar un desastre diez veces mayor al de Chernóbil en 1986. En un video publicado en la cuenta de Telegram de la planta, el portavoz Andrei Tuz alertaba de la situación.
“Tras un bombardeo de las fuerzas rusas en la central nuclear de Zaporiyia, se ha declarado un incendio”, indicó el portavoz Andrei Tuz en un video publicado en la cuenta de Telegram de la planta.
“El ejército ruso está disparando desde todos lados sobre la central nuclear de Zaporiyia, la más grande en Europa. Ya se ha prendido fuego”, tuiteó.
¡Si estalla, será diez veces más grande que Chernóbil! Los rusos deben parar el fuego INMEDIATAMENTE, permitir a los bomberos establecer una zona de seguridad”, alertó.
La agencia de inspección de las plantas atómicas de Ucrania luego publicó que "El territorio de la central nuclear de Zaporiyia está ocupado por las fuerzas armadas de la Federación Rusa" pero "No se han registrado cambios en la situación de la radiación", agregó.
Según la misma fuente, "el personal operativo controla los bloques energéticos y garantiza su funcionamiento de acuerdo a las exigencias de los reglamentos técnicos y de seguridad".
Se efectúan inspecciones para conocer con precisión los daños, agregó.
De los seis bloques, el primero fue puesto fuera de servicio, los número 2, 3, 5 y 6 están en proceso de enfriamiento y el 4 se encuentra operativo.
La agencia no dijo cuál era la situación de los bloques antes del ataque.
"La seguridad nuclear está ahora garantizada", afirmó por la noche en Facebook Oleksander Starukh, jefe de la administración militar de la región de Zaporiyia. El ataque no dejó víctimas, indicaron los socorristas ucranianos en Facebook.
¡Amenaza a la seguridad mundial!
Unas horas antes, Ucrania había indicado a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) que tanques e infantería rusa se encontraban muy cerca de la ciudad de Energodar, a pocos kilómetros de la central.
Construida en 1985, durante la Unión Soviética, la planta de Zaporiyia cuenta con seis reactores y suministra gran parte de la energía del país.
En un comunicado el jueves, el director general de la AIEA, Rafael Mariano Grossi, pidió que se detenga de inmediato el uso de la fuerza en Energodar y cerca de la central.
También señaló que la agencia seguía asistiendo a Kiev y otros actores para garantizar la seguridad de las instalaciones nucleares de Ucrania, que dispone de 15 reactores en cuatro plantas distintas.
El 24 de febrero se produjeron combates cerca de la antigua central de Chernóbil, sitio del peor accidente nuclear de la historia, que ahora está bajo control de las tropas rusas.
El alcalde de Zaporiyia, Dmitry Orlov, hizo anoche un desesperado llamado para que se detenga el ataque ruso a la central nuclear
“¡Amenaza a la seguridad mundial! Como resultado del bombardeo enemigo continuo de edificios y unidades de la planta de energía nuclear más grande de Europa, la planta de energía nuclear de Zaporiyia está en llamas”, escribió en su cuenta de Telegram.
El ataque a la central nuclear se produce al final de una jornada en la que por momentos parecía que Rusia y Ucrania habían acordado un alto el fuego total, pero enseguida la realidad golpeó tan fuerte como las bombas del ejército de Vladimir Putin sobre las ciudades ucranianas. La segunda ronda de negociaciones ruso-ucranianas concluyó ayer jueves con un acuerdo para crear corredores humanitarios en algunas zonas para evacuar a civiles y declarar un cese al fuego solo en esos lugares. En el resto del país, Rusia mantiene su asedio.
Los temas claves de la agenda se centraron en lograr una tregua y la creación de corredores humanitarios para la evacuación de civiles de pueblos y ciudades destruidos o bombardeados, según Mykhailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.
Unas dos horas y media después, representantes de ambos grupos negociadores informaron que en la reunión se acordó observar ceses al fuego temporales en los lugares donde se establezcan los corredores humanitarios.
Habrá una tercera reunión a principios de la próxima semana, también en Bielorrusia.
Mientras se desarrollaban las negociaciones, en el terreno bélico la ofensiva de las tropas rusas siguió: desde el norte del país, a través de las regiones de Chernóbil, Chernígov y Sumy hacia Kiev; desde el noreste hacia Járkov; desde el sur hacia Nikoláev, Zaporozhye y Mariúpol y la cuarta línea de ataque es desde las autoproclamadas repúblicas prorrusas de Donetsk y Lugansk, en el este del país.
En el norte de Kiev, al menos 33 personas murieron en un bombardeo ruso contra un área residencial en Chernígov, informó ayer el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania, y los bombardeos rusos han destruido completamente Yakovlivka, un pueblo de 600 habitantes en la región de Járkov. Ese pueblo tenía 45 casas, 21 de las cuales quedaron completamente destruidas. No había instalaciones militares, solo una escuela, una guardería, un club, un dispensario y dos tiendas.
Lo peor, por llegar.
El presidente ruso Vladimir Putin afirmó ayer jueves que la invasión avanza “según lo planeado”, en el octavo día de operaciones.
Tras la caída de Jersón, la primera ciudad importante tomada por los rusos, Putin no mostró disposición alguna de atender el clamor mundial para poner fin a la guerra ni se mostró afectado por el arsenal de sanciones occidentales.
“La operación militar especial avanza conforme al calendario previsto, según lo planeado”, dijo Putin al abrir una reunión del Consejo ruso de Seguridad, agregando que sus tropas combaten contra “los neonazis” y que “rusos y ucranianos son un solo pueblo”.
En una conversación previa con su par francés, Emmanuel Macron, Putin prometió continuar “sin concesiones” su ofensiva. Tras esa conversación, Macron llegó a la conclusión de que “lo peor está por venir” en Ucrania, informó la Presidencia francesa.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, pidió ayer un mayor apoyo de las potencias occidentales y advirtió que si su país es derrotado, Rusia no vacilará en atacar a los países bálticos y el resto de Europa.
En este contexto, Estados Unidos estableció una línea directa con el Ministerio de Defensa ruso para evitar encontronazos no deseados entre las fuerzas rusas y estadounidenses desplegadas en Europa.
Brigadas bielorrusas
El Mando General de las Fuerzas Armadas ucranianas afirmó que en territorio bielorruso, cerca de la frontera con Ucrania, hay 38 brigadas de asalto aerotransportado de Bielorrusia que han recibido la orden de cruzar la frontera, tras lo cual recibirían otra orden de atacar.
En dirección de la región de Volinia, en el oeste de Ucrania y fronterizo con Bielorrusia al norte y con Polonia al oeste, “38 brigadas de asalto aerotransportado se encuentran en una zona boscosa”, afirmó en el último parte colgado en su página oficial de Facebook. (Con información de AFP y EFE).