Cortes de energía en China afectan la cadena de la agroindustria y los insumos.
“La producción de alimentos básicos como granos, carnes y verduras no se ve muy afectada, ya que el suministro eléctrico se mantiene relativamente estable.Montevideo – TodoElCampo – 16 provincias chinas han sufrido, en las últimas semanas, la interrupción en la producción en todos los sectores, según el estudio Impact of Power Shock on China's Impact of Power Shock on China's F&A Market, con un “impacto que se está extendiendo por toda la cadena de suministro, tanto en China como en todo el mundo”, advierte el informe producido por el equipo de agronegocios del banco en China.
“Una serie de factores” ha generado problemas en el suministro de energía, por un lado hay menos disponibilidad de carbón “como resultado de menores importaciones y cierres de minas en años anteriores”; en segundo lugar “el aumento de la demanda resultante de la rápida recuperación de la fabricación y las exportaciones” con “mayor consumo de electricidad debido al clima y los estrictos objetivos de reducción de emisiones de Beijing”, explican los analistas del mercado.
Según ellos, el impacto es variado entre los diversos sectores de alimentos y agronegocios (F&A): “La producción de alimentos básicos como granos, carnes y verduras no se ve muy afectada, ya que el suministro eléctrico se mantiene relativamente estable. Sin embargo, la presión sobre el procesamiento y los sectores relacionados, incluidos el embalaje y la logística, está aumentando, lo que eventualmente afectará a todos los demás sectores”.
En la producción de granos y oleaginosas, varias unidades de molienda detuvieron temporalmente las operaciones. “Los bajos volúmenes de importación proyectados debido a los márgenes de molienda negativos en los meses anteriores y las operaciones actualmente estancadas conducirán a una disminución continua en las existencias de harina de soja, lo que ya ha causado un reciente aumento de precios”, dijo Rabobank.
Para el maíz, señalan los expertos, las operaciones de secado representan un desafío para los comerciantes y procesadores en el momento exacto de la adquisición y almacenamiento de la nueva cosecha, que se está cosechando en este momento. “La utilización de la capacidad de los molinos de maíz también ha disminuido debido a los cortes de energía”, dijeron.
AFECTACIÓN A FERTILIZANTES Y AGROQUÍMICOS.
En las bolsas agrícolas el impacto de la crisis energética de China se siente con más fuerza: “Los fertilizantes y los agroquímicos inevitablemente enfrentarán una creciente presión por la actual escasez de carbón y los recortes de electricidad. Si bien el énfasis del Gobierno está en garantizar el suministro de energía para la producción de fertilizantes, las exportaciones de fertilizantes de nitrógeno y fosfato se restringirán, lo que podría aumentar los precios en el mercado global”.
El informe también proporciona un análisis del impacto a largo plazo. “En cada crisis hay una oportunidad. La transición energética es el componente principal de los esfuerzos del Gobierno chino para reducir las emisiones, pero la actual escasez de energía expone, sin rodeos, cuán inadecuada es la transición. Las estadísticas oficiales muestran que el carbón todavía representaba el 57% de la generación total de energía en 2020, aunque cayó del 64% en 2015. Cambiar la cadena de producción y suministro a un sistema más sostenible es obviamente la salida. La transición energética en el sector de F&A será otro tema”, concluye Rabobank.
Artículo de Leonardo Gottems, Agrolink, con adaptaciones para TodoElCampo