PESIMISMO
El 67% de empresarios españoles con presencia en Latinoamérica ven la economía de esa región con pesimismo
MADRID (Uypress) - Dos de cada tres empresarios españoles con presencia en América Latina ven con pesimismo la situación de la economía en dicha región, frente al 20% que cree que el entorno económico mundial afectará positivamente y el 13% que ve las cosas más o menos igual que en el ejercicio pasado.
Los datos fueron recogidos por un estudio de la escuela de negocios IE Business School presentado este miércoles en Madrid.
El 2019 terminó con una expansión solo una décima por encima del 0% y para el 2020 se esperan bajos niveles de crecimiento.
"Las principales causas de este estancamiento económico hay que buscarlas en la guerra comercial entre EE UU y China, en los problemas con el sector manufacturero global y en la crisis de la economía argentina", apunta Juan Carlos Martínez, profesor de la escuela de negocios que firma el Panorama de inversión española en Iberoamérica 2020.
El brote de coronavirus originado en la provincia china de Hubei aún no está incluido en el documento, dado que el trabajo de campo -12 firmas del Ibex consultadas, otras 23 cotizadas y una cincuentena más no cotizadas pero con presencia en América Latina- fue anterior.
El mercado interno sigue siendo la principal ventaja comparativa que ofrece la región para las empresas españolas, según el 77% de los encuestados, con la competitividad (costes laborales bajos), la ubicación geográfica ventajosa y los acuerdos de libre comercio a la zaga.
En el lado opuesto, la inestabilidad política permanece como el mayor riesgo. Las perspectivas de las firmas españolas están lejos de ser homogéneas.
Sus proyecciones económicas siguen siendo notablemente positivas para un ramillete de países -Colombia, Perú, Panamá, Costa Rica y República Dominicana- que logran notas por encima del 3,5 sobre cinco (o siete sobre 10). En los dos últimos casos -Costa Rica y Panamá- la calificación incluso mejora respecto al año pasado, una rara avis en la foto fija general iberoamericana.
Argentina (poco más de cuatro sobre 10) y Venezuela (0,82 sobre 10) obtienen, por su parte, las peores notas a la pregunta sobre la evolución del cuadro macroeconómico futuro.
México -la segunda mayor economía latinoamericana, cuya capital se mantiene como la ciudad preferida para ubicar las operaciones centrales para la región- sigue siendo el destino predilecto para invertir: más de ocho de cada diez firmas españolas consultadas tienen intereses allí, frente a las algo más de seis de cada 10 que están en Colombia y en Perú, el 57% de Brasil y el 55% de Chile, que se ve fuertemente lastrado por el estallido social de finales del año pasado.
Pese al reconocimiento de que el panorama económico será peor este año que el anterior, el 65% de las compañías españolas con intereses en el subcontinente (76% en 2019) prevé incrementar sus inversiones en la región, frente al 32% que las mantendrán (23% un año atrás) y el 3% (1% el ejercicio pasado) que reducirá su exposición.
Por países, los fondos destinados a hacer crecer su negocio aumentarán -mayoritariamente, mediante crecimiento orgánico- en todos los países de la región salvo en cuatro: Argentina, Nicaragua, El Salvador y Cuba.
Por primera vez desde 2013, las empresas españolas creen que su negocio de medio plazo en Iberoamérica irá peor que en España: el 58% en el caso de las grandes empresas y el 59% en el de las pymes, una situación que Martínez achaca tanto a los bajos niveles de crecimiento esperados para la mayoría de los países de la región como a la "prolongación del ciclo de crecimiento de la economía española".
Fuente: Ignacio Fariza/El País de Madrid